A unos 60 kilómetros de Junín de los Andes, en el paraje San Ignacio se encuentra un cultrún gigante inmerso en un gran valle, que en su interior contiene los restos del beato y Lirio de la Patagonia.
El lugar, situado al pie del cerro denominado Ceferino, constituye un punto dentro del mapa de turismo religioso de la provincia de Neuquén, donde no hay demasiado ruido porque todos los visitantes entienden lo sagrado que es el lugar.
El sitio solía ser un lugar habitado sólo por comunidades mapuches, pero desde agosto de 2009, San Ignacio es el lugar donde están depositados los restos de Ceferino Namuncurá, que fueron trasladados desde Fortin Mercedes.
Apenas se llega al lugar, una edificación llama la atención. Se trata de un santuario en forma de cultrún gigante (un tambor típico de la cultura mapuche) construido de madera entramada, techo de chapa y unas ventanas en forma de rombo con vidrios de colores, con la inscripción de la frase que caracterizó al joven: “Quiero ser útil a mi gente”.
El santuario tiene ocho metros de diámetro en la base y doce en la parte superior con forma circular. Además, el diseño permite a los fieles y visitantes desplazarse en su interior alrededor de los restos del beato, conservados en una fosa en la roca, ubicada en el centro.
A pocos metros del cultrún, un sendero borroso indica el camino ascendente hacia el cerro de varios metros de altura llamado Ceferino. Son varios minutos de camino por momentos empinado. En la cima, los visitantes encuentran un santuario donde se pueden encender velas y delante de ese lugar y mirando al imponente valle, hay una estatua de Ceferino y una cruz que completan la escena.
El diseño de la construcción es del arquitecto y artista Alejandro Santana, quien es el autor además de las esculturas que conforman el parque temático Vía Crucis de Junín de los Andes.
A San Ignacio se puede llegar tanto desde Zapala en dirección a Junín como desde Collón Cura en dirección a Junín. En caso de ir por Zapala, se debe tomar la Ruta Nacional 40 que va a Junín y unos 20 km antes de llegar a La Rinconada, hay un almacén sobre la ruta y el acceso a San Ignacio, que parece que partiera del patio de la vivienda.
En caso de ir por Collón Cura, una vez que se llega a La Rinconada, se debe retomar la Ruta Nacional 40 hacia Zapala y tras transitar unos 20 km esta el acceso al paraje San Ignacio. De ahí en más, son alrededor de 10 km en dirección oeste por un camino de tierra mejorado y zigzagueante, que llega al gran valle.
• 172 km distancia entre Zapala y La Rinconada.
• 392 km distancia entre Neuquén y Junín de los Andes.
• 60 km distancia entre Junín de los Andes y San Ignacio.