A lo largo de su recorrido ofrece lugares para descansar, para realizar deportes, un anfiteatro para espectáculos y el ambiente ideal para pasar un buen momento en familia o entre amigos.
En Roca, "El Canalito" es sinónimo de paseo con mucho verde. Y es el sitio más elegido para un momento de descanso, esparcimiento, deporte o simple contemplación de la arboleda.
Estas plazoletas recorren la ciudad de este a oeste, desde calle Mendoza a San Juan, entre Isidro Lobo e Irigoyen, bordeando el canal secundario de riego III. El "Canal de los Milicos" o "Canalito" en Roca se transformó en un homenaje a las ciudades del Alto Valle de Río Negro, ya que cada una de las plazas lleva el nombre de una de ellas.
El 30 de marzo de 1979 se pusieron los nombres a cada una de ellas en el tramo comprendido entre calles Mendoza y San Juan: Plaza Chichinales, Villa Regina, Gral. Enrique Godoy, Luis A. Huergo, Mainqué, Cervantes, Alejandro Stefenelli, General Roca, J.J. Gómez, Guerrico, Allen, Fernández Oro, Cipolletti, Ferri, Cinco Saltos, Contralmirante Cordero, Barda del Medio y Villa Manzano.
Todo el recorrido está parquizado. Las tareas comenzaron en marzo de 1987 y con el esfuerzo y la ayuda de los vecinos de los alrededores se consiguió que este paseo luzca espléndido.
En los meses de calor, este espacio se llena de roquenses que buscan un lugar fresco y apacible donde combatir las agresiones climáticas. Las familias se reunen en torno del mate mientras los chicos disfrutan del agua y de los espacios verdes para correr y jugar.
Cuando cae el sol el paisaje cambia, comienza a inundarse de zapatillas, buzos, sudaderas, rodilleras, cronómetros y todo se tranforma en un gran gimnasio donde los amantes del deporte y el aire libre hacen despliegue de sus habilidades.
Entre las calles Italia y Belgrano, el paseo del Canalito tiene un anfiteatro que sobre todo los fines de semana congrega a músicos y artistas locales para mostrar su arte ante una gran concurrencia de personas. En los meses de invierno estas actividades no son tan frecuentes, pero no desaparecen por completo.
Para los más románticos y noctámbulos, el paseo cuenta con iluminación a lo largo de todo el trayecto.